¿Te interesa?
En cinco simples pasos te mostramos cómo aplicarlo en tu día a día:
1. Conéctate con tu entorno: escucha a las personas a tu alrededor y observa su comportamiento.
2. Identifica la necesidad a la que le puedes dar respuesta, bien sea porque tienes las habilidades o porque conoces del tema.
3. Deja volar tu imaginación: dibuja, escribe, haz tu propia lluvia de ideas sin filtro. Al final, elige las respuestas que más se acercan a lo que identificaste.
4. Crea tu propio modelo: ordena tus ideas, traza un plan para darles forma y define lo que necesitas para hacerlo realidad.
5. Testea tu idea: crea una versión preliminar de tu idea y compártela con tus familiares y amigos. Identifica las oportunidades de mejora y vuelve a empezar el proceso hasta que la idea esté lista para ser lanzada.
Recuerda que los verdaderos genios no son los que tienen ideas perfectas, sino los que hacen del proceso de creación, una oportunidad para probarlas, aprender y perfeccionarlas.